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La Huella Hídrica en los Procesos Constructivos

El agua, un recurso cada vez más escaso y valioso, impulsa la necesidad de reducir la huella hídrica, que mide el consumo de agua en la producción y uso de bienes y servicios. Los procesos constructivos son particularmente demandantes en cuanto a agua, desde la extracción de materiales hasta la operación de edificios. Por lo tanto, las empresas constructoras están reconociendo la importancia de abordar este desafío para lograr un desarrollo sostenible.

Este artículo explora en profundidad la huella hídrica en la construcción y cómo se relaciona con los procesos de edificación. ¡Comenzamos!

Definición y concepto de huella hídrica

La huella hídrica es un indicador clave que mide la cantidad total de agua utilizada directa e indirectamente para la producción y consumo de bienes y servicios durante su ciclo de vida. Esta herramienta proporciona una imagen completa de la cantidad de agua necesaria para satisfacer las diversas demandas humanas y ambientales asociadas con un producto determinado. Con relación a los procesos constructivos, la huella hídrica se evalúa para estimar la cantidad de agua utilizada para la construcción, operación y demolición de edificios e instalaciones.

 Cálculo de la huella hídrica

El cálculo de la marca de agua implica una evaluación detallada de tres componentes principales:

-Huella Hídrica Verde: Se refiere a la cantidad de agua de lluvia utilizada para producir cultivos y vegetación utilizada en la construcción. Contiene agua evaporada durante el crecimiento del material vegetal.

-Huella Hídrica Azul: representa la cantidad de agua dulce producida a partir de fuentes superficiales y subterráneas para satisfacer las necesidades del ciclo de vida de un producto. En la construcción, esto incluye la cantidad de agua utilizada para mezclar hormigón, enfriar maquinaria y suministrar agua potable a los edificios. Huella de Aguas

-Grises: Es la cantidad de agua necesaria para diluir y tratar los contaminantes del proceso productivo, evitando la degradación de los cursos de agua. En la construcción, esto puede significar el tratamiento de aguas residuales y la eliminación de productos químicos utilizados en la producción de materiales.

 Huella hídrica directa e indirecta en la construcción

La huella hídrica se divide en dos categorías principales: directa e indirecta.

La Huella Hídrica directa refiere al agua utilizada directamente en la construcción y operación de edificios. Esto incluye el agua utilizada para la preparación del terreno, los materiales de producción como cemento y acero, y el consumo diario en el edificio para  lavado,  limpieza y  calefacción.

La huella Hídrica indirecta incluye el agua utilizada para producir materiales y la energía utilizada para construir y operar edificios. Por ejemplo, el agua necesaria para producir la madera utilizada en la construcción aumenta la huella hídrica indirecta.

En la construcción, las huellas hídricas directas e indirectas se superponen y cubren todo el ciclo de vida del edificio. Desde la extracción del material hasta su uso y eventual desmantelamiento, cada paso afecta el uso del agua. Por tanto, comprender y gestionarlas tanto directa como indirecta son esenciales para promover la sostenibilidad de la industria de la construcción y reducir su impacto ambiental.

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La importancia de la huella hídrica en la construcción

El consumo de recursos naturales juega un papel crucial en la construcción de las bases de la sociedad moderna, y el agua es uno de los recursos naturales más importantes y valiosos en este proceso. Se refiere a la cantidad total de agua utilizada directa e indirectamente durante el ciclo de vida del proyecto, desde la adquisición de materias primas hasta la demolición del edificio.

En una situación global donde la escasez de agua es una preocupación en muchos lugares, es necesario evaluar y reducir la huella hídrica en los procesos de construcción. El agua es fundamental en muchas obras de construcción:  producción de cemento y hormigón, preparación del terreno, producción de energía para el trabajo y consumo diario de los edificios. Todos estos pasos afectan el signo de agua en general.

Factores que afectan a la huella hídrica en la construcción

La huella hídrica de la construcción está influenciada por muchos factores, cuya comprensión es esencial para implementar medidas de mitigación efectivas. Los factores más importantes son:

-Materiales de construcción: La minería y producción de cemento, acero y otros recursos naturales que consumen agua pueden tener impactos significativos. Por ejemplo, se pueden utilizar cientos de litros de agua para producir una tonelada de cemento.

– Técnicas de construcción: Los métodos de construcción tradicionales pueden ser menos eficientes en términos de uso del agua. La adopción de tecnologías más avanzadas y sostenibles puede reducir significativamente la huella hídrica.

-Gestión del agua en el sitio: La gestión del agua en el sitio de construcción es otro factor importante. Prevenir fugas, reutilizar el agua e implementar sistemas de riego eficientes puede ayudar a reducir el consumo.

-Uso de la construcción: Además de la fase de construcción, el uso de los edificios también afecta al signo del agua. También se deben considerar el uso doméstico del agua, los sistemas de calefacción y refrigeración y las operaciones industriales en interiores.

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Estrategias para Reducir la Huella Hídrica en la Construcción

Ante los desafíos que plantea la filigrana en la construcción, se han desarrollado diversas estrategias para mitigar su impacto:

-Elección de materiales para el desarrollo sostenible: elegir materiales de construcción que consuman menos agua puede tener un impacto significativo. Los materiales alternativos como la madera certificada, el hormigón reciclado y otros materiales con bajo contenido de agua pueden ser mejores.

-Tecnologías de purificación de agua: la implementación de sistemas de purificación de agua en el sitio de construcción puede permitir reutilizar el agua para fines potables, como riego y limpieza.

-Eficiencia constructiva: La adopción de métodos de construcción más eficientes, como la prefabricación y la modularidad, puede reducir el tiempo de construcción y, por tanto, el consumo de agua.

-Recolección y reciclaje de agua de lluvia: cuando los edificios se diseñan con sistemas de recolección de agua de lluvia, este recurso se puede reutilizar para fines no potables, como sistemas de riego y refrigeración.

-Educación y sensibilización. Aumentar la educación y la conciencia sobre la importancia de la conservación del agua entre los profesionales de la construcción y los posibles propietarios puede influir en la adopción de prácticas más sostenibles.

Conclusiones

La huella hídrica de los procesos constructivos es un factor que no se puede ignorar en la búsqueda de la sostenibilidad. Desde la extracción del material hasta el uso del edificio, cada paso es importante en una adecuada gestión del agua. Al adoptar estrategias inteligentes y aprender de historias de éxito, la industria de la construcción puede hacer una contribución significativa a la preservación de este importante recurso natural creando un futuro más verde y responsable.

En resumen, la huella hídrica de la construcción es un desafío que requiere atención y acción inmediata. Con la combinación adecuada de conciencia, innovación y colaboración, podemos construir un mundo donde la construcción sea sinónimo de desarrollo sostenible en lugar de agotamiento de los recursos. Si quieres saber más sobre arquitectura sostenible y la información más actual, entra en nuestro blog.